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@Senadis_RM16/08/2012
Francisca lleva seis años y medio jugando, desde que Doris Gildemeister la invitó a jugar en su escuela al verla en una sesión de rehabilitación de la Teletón. Los mismos años que tiene practicando, los tiene de experiencia compitiendo, “desde que comencé a jugar empecé a competir, me tiré a los leones desde el principio”, asegura la actual número 27 del mundo.
Dice que al momento de su clasificación estaba en el extranjero, junto a una persona muy especial para ella que la acompañó a abrir la lista de las 32 clasificadas, y asegura que ese instante en que vio su nombre fue el “momento más mágico” que ha tenido en su vida.
Sobre su participación tiene dos cosas que decir. Primero que siente un orgullo tremendo de representar Chile y que “es un maravilloso desafío que voy a asumir dando lo mejor de mí” y segundo que espera “disfrutarla al máximo, para entrar tranquila y confiada a la cancha. Es la mejor manera de dar una sorpresa”, finaliza.
No a diferencia del resto de sus colegas tenistas, dice que meterse en el circuito profesional “no fue fácil al principio, había muchas trabas”, y agrega: “sin embargo CCU comenzó a auspiciarme y todo comenzó a ser más fácil de planificar”. Como hemos visto en el ejemplo de todos los deportistas, cualquiera sea la disciplina que practique, la carrera es difícil sin un auspiciador que los ayude a perseguir sus sueños.
Francisca desde muy temprana edad quiso ser una deportista profesional, siendo, llegar a competir en unos juegos olímpicos uno de sus más grandes anhelos de la infancia. “Mi sueño, desde los 5 años, es ir a unos juegos olímpicos, así que toda mi vida estuve pensando en cómo lograrlo”. Siendo una mujer de gran fortaleza y espíritu deportivo agrega que “desde el primer día que comencé a jugar tenis estaba pensando en cómo ser profesional y como lograr ir a unos JJ.OO”. Este 29 de agosto el sueño tomará forma de realidad.
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