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Autoridades junto a las personas beneficiadas.
Autoridades junto a las personas beneficiadas.

20/09/2016

Pro- O’Higgins y Senadis llevaron la Alfabetización Digital a personas en situación de discapacidad en San Vicente de Tagua Tagua

Los cursos de computación básica e Internet fueron impartidos a personas con capacidades especiales, adultos mayores, jefas de hogar y cuidadoras para integrarlos al manejo y aplicación de la tecnología.

Acortar la distancia en el acceso, uso y apropiación de las herramientas digitales representa una línea de acción fundamental, más aún para quienes se encuentran fuera del sistema regular de conocimiento de la computación. Identificando esta realidad, la Corporación Pro O´Higgins en un trabajo mancomunado con Senadis y el apoyo de la Municipalidad de San Vicente de Tagua Tagua, llevó la Alfabetización Digital a la comuna. Una iniciativa que desde sus inicios imparte cursos en distintas zonas de la región de O´Higgins y que a partir del 2015 decidió abrir más oportunidades con carácter inclusivo.

Esta vez, fueron 35 los beneficiarios del programa, provenientes de la Escuela Especial Paula Jaraquemada, la Agrupación de Discapacitados Juan Carlos Saldias, jefas de hogar y adultos mayores, los que aprendieron nociones básicas de computación en la sala móvil dispuesta especialmente para sus clases.

El Gerente General de la Corporación Pro O´Higgins, Braulio Guzmán, destacó la importancia de estas iniciativas en un mundo que cada vez demanda mayor conectividad.

“La experiencia de Alfabetización Digital con SENADIS, permite orientar nuestros esfuerzos hacia una población de personas con discapacidad que tiene mayores dificultades para superar la brecha digital, es decir, aprender a utilizar las tecnologías de la información y las comunicaciones a su vida cotidiana; para incorporarse al mundo del trabajo, para comunicarse, o sencillamente para entretenerse: abrir esa gran ventana de la información para hacer suya la ciudanía electrónica”.

Por su parte, el Director Regional de Senadis, Alejandro Pérez Oportus, señaló que “la discapacidad no es una enfermedad, es una situación y hoy día estamos derribando esas barreras, estamos generando igualdad de condiciones para quienes muchas veces se sienten discriminados. El objetivo del Gobierno es ir disminuyendo la brecha de desigualdad, es decir, que todos los chilenos y chilenas tengas las mismas oportunidades, y hoy queremos que las personas en situación de discapacidad no queden fuera de la tecnología, sino que sean parte de ella”.

Así, los vecinos de San Vicente se integraron en cursos de computación básica, los que se desarrollaron desde el 16 al 29 de agosto en la sala móvil que se ubicó en la plaza de la comuna y este martes, los participantes recibieron su certificación en Alfabetización Digital, sumándose como nuevos usuarios de estas herramientas.

“La alfabetización digital en personas en situación de discapacidad y la tercera edad es una chance para que se sientan que son capaces, pero con esto no sólo se llevan una nueva capacidad, sino también una mayor posibilidad de integración social”, subrayó el alcalde de San Vicente, Jaime González.

Para el director de la escuela especial Paula Jaraquemada de la comuna, los cursos representaron una nueva etapa para sus alumnos: “es importante que todo el mundo tenga acceso al uso de las tecnologías, porque facilitan la vida y los chicos así lo han comprobado. Ellos iban felices a las clases”, indicó.

Con diploma y nuevos conocimientos

Luego de avanzar en los aspectos básicos de la computación y el uso de internet y redes sociales como Facebook, los beneficiarios de los cursos hoy dicen ver con otro sentido estas herramientas: Ya no sólo hechas para algunos, sino también para ellos.

“Tanto las personas discapacitadas, como los adultos mayores necesitamos este tipo de estudios, saber cómo es un computador, sus piezas y cómo usarlo. Yo no sabía nada de eso y hoy en día me siento orgulloso de haber aprendido”, comentó Benedicto Camilla, beneficiario de los cursos.

Para la señora María Noemi Aedo, las clases reafirmaron que nunca es tarde para adquirir nuevos conocimientos. “Estoy feliz con mi diploma. A mis 79 años esto ha sido un sueño. Ahora sé encender y apagar un computador, escribir un poquito, y entrar a Facebook para ver a mis nietos. Nunca antes lo había hecho”.